Mientras el proceso judicial, después de la lectura parcial de sentencia condenatoria, en el caso del asesinato de los líderes de la comunidad nativa Saweto, parece avanzar a paso de motelo, las viudas advierten que viven momentos de angustia porque las amenazas de los taladores ilegales, presuntamente ligados al narcotráfico, persite.
Ellas acusan directamente a la familia de Segundo Atachi Félix, uno de los madereros condenados por los crímenes, de seguir operando en la zona, por lo que llamaron la atención para que les brinden seguridad, frente a la persistente tala ilegal.
Julia Pérez, Ergilia Rengifo, Lita Rojas y Lina Ruiz son las viudas de Saweto. Ellas vienen transitando por un largo camino legal para encontrar justicia por los cuatro líderes asesinados el 6 de setiembre del 2014.
Ante tantos y frecuentes llamados de auxilio han conseguido que el Ministerio del Interior anuncie reuniones con los líderes indígenas para garantizar la seguridad en la comunidad Alto Tamaya-Saweto (Ucayali).
Se han realizado gestiones con el jefe de la Región Policial Ucayali, general PNP Carlo Mori, para que atienda y coordine el reforzamiento de la seguridad policial para los familiares de los dirigentes victimados.
También sse decidió que las visitas de los representantes del Estado a la comunidad nativa se coordinen de manera conjunta con la Organización Regional Aidesep Ucayali (ORAU), con la Aidesep y con las autoridades indígenas de Alto Tamaya-Saweto.
Julio Cusuriche, apu y directivo de la AIDESEP, expresó su respaldo a todas las gestiones ya que los familiares de los líderes asesinados, enfrentan amenazas cada vez que alzan la voz para denunciar amedrentamientos y el avance de actividades ilegales y proyectos extractivos en sus territorios.
Preparan seguridad
Según Aidesep, son 33 los defensores ambientales asesinados desde el 2013 en el país.
