El MAAP elaboró un “Mapa Base” (que está incluido en el informe N°218”), en el cual, indicó que 29 líderes indígenas fueron asesinados en la Amazonía peruana en el periodo 2010–2023.
Por Sebastian F. Pérez
El informe N°218 del Proyecto Monitoreo de la Amazonía Andina (MAAP, por sus siglas en inglés) indicó que la frecuencia de asesinatos a líderes indígenas y defensores ambientales de la Amazonia peruana, tuvo un incremento durante los últimos años: con solo indicar que, alrededor de la mitad de asesinatos, ocurrieron desde el 2020. En Ucayali, fueron asesinados cuatro líderes ashéninkas (en 2014), y, seis líderes kakataibos (entre el periodo 2020–2024) a causa de actividades ilícitas.
Según el MAAP, los asesinatos (con previas amenazas) de líderes indígenas, están clasificados en cinco categorías: “tráfico de tierra, tráfico de madera, cultivos ilícitos de coca, minería ilegal, y, en protestas”. No obstante, en determinadas circunstancias, varias categorías concurren simultáneamente, en el asesinato de los líderes.

TRÁFICO DE MADERA
En el caso del tráfico de madera, el Organismo de Supervisión de los Recursos Forestales y de Fauna Silvestre (OSINFOR), identificó que aproximadamente el 20% de madera extraída en la Amazonia peruana, durante el 2021, tiene procedencia ilícita. Amazonas, Loreto, Madre de Dios, Ucayali, registraron una cantidad considerable de extracción de madera no autorizada.
Edwin Chota Valera, Francisco Pinedo Ramírez, Jorge Ríos Pérez y Leoncio Quintisima Meléndez fueron asesinados, en 2014, por traficantes de madera en la comunidad nativa Saweto, ubicado en la frontera de Perú–Brasil. En abril de este año, cuatro traficantes de maderas (de los cuales, dos eran empresarios), fueron declarados culpables de los asesinatos de los cuatro líderes indígenas. Y los condenaron a 28 años, tres meses de prisión efectiva.

CULTIVOS ILÍCITOS
En cuanto a los cultivos ilícitos de coca, el MAAP menciona que continúa incrementándose, particularmente en el centro de la Amazonia peruana, entre Huánuco y Ucayali.
La Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida Sin Drogas (DEVIDA), y, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC por sus siglas en inglés), indicaron que, durante el 2023, en Aguaytia, capital de la provincia de Padre Abad, decomisaron el 1.68% de producción de clorhidrato de cocaína (CC), el 1.49% de cocaína base (CB), y el 0.01% de pasta básica de cocaína (PBC), lo que indica que la producción de droga continúa en ese vasto territorio de los kakataibo.
El pueblo ancestral kakataibo, ubicado en Huánuco y Ucayali, es la principal víctima de los narcotraficantes. Desde el 2020 hasta el 2024, seis líderes indígenas kakataibo fueron asesinados por defender su territorio ancestral del peligroso ingreso de los narcotraficantes y traficantes de tierras.




