Tres comunidades nativas de Atalaya, en Ucayali, han dado un paso importante hacia la conservación de sus ecosistemas forestales y de fauna gracias al apoyo técnico del Organismo de Supervisión de los Recursos Forestales y de Fauna Silvestre (OSINFOR). Este respaldo busca fortalecer la implementación de planes de conservación, permitiendo a las comunidades compensar sanciones administrativas a través de la protección de sus bosques, un enfoque clave para la sostenibilidad regional.

Entre el 23 y el 27 de octubre, el OSINFOR, junto a la Sede Operativa Forestal y de Fauna Silvestre (SOFFSA) del Gobierno Regional de Ucayali, ofreció capacitación técnica y personalizada a las comunidades de Sabaluyo Mamoriari, Lagarto Millar y Diobamba. A través de actividades prácticas, estas comunidades recibieron instrucción en conservación y recuperación de áreas degradadas, lo que les permite cumplir con el mecanismo de compensación de multas mediante acciones de preservación y uso sostenible.

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Durante las asistencias técnicas, los participantes realizaron actividades fundamentales como demarcación y señalización de límites, patrullajes de control, y capacitación en protección forestal comunitaria. Además, se promovió el uso de la herramienta digital MiBosque para reportar actividades en tiempo real y el manejo de GPS, utilizando el método “Aprender Haciendo” de OSINFOR, que facilita un aprendizaje práctico en campo.

Gracias a estas acciones, los Comités de Vigilancia y Control Forestal Comunitario (CVCFC) han fortalecido sus capacidades para gestionar autónomamente sus recursos naturales. Actualmente, cada comunidad se encuentra en distintas etapas de sus planes de conservación: Sabaluyo Mamoriari inicia el proceso, con un plazo de tres meses para cumplir sus actividades; Lagarto Millar ha culminado su primer año de manera exitosa y progresa en el segundo; y Diobamba ha renovado el mandato de su comité de vigilancia y regulariza los informes de cumplimiento de los últimos años.

Este esfuerzo de OSINFOR y el Gobierno Regional de Ucayali marca un avance significativo en la gestión forestal sostenible y en el compromiso de las comunidades de Atalaya con la conservación de sus ecosistemas naturales, fortaleciendo así la capacidad local para preservar sus recursos forestales y la biodiversidad amazónica.