Después de pasar tres meses tras las rejas, Hildebrando Aquino Villanueva fue finalmente liberado de prisión por orden de la Sala de Apelaciones. Esta decisión se basó en un nuevo análisis de ADN que, en un principio, lo había vinculado al caso por el que fue encarcelado. Los jueces de segunda instancia revocaron la medida de prisión preventiva impuesta a Aquino Villanueva en relación con el robo en el que perdió la vida Juan Sabino Polinar.
Durante la audiencia de apelación celebrada el 15 de abril, se revisó detenidamente el informe pericial de ADN elaborado por biólogos forenses. Este nuevo análisis no encontró evidencia biológica en la escena del crimen que vinculara directamente a Aquino Villanueva con el delito. El informe inicial había sugerido una conexión basada en el haplotipo del cromosoma Y, pero se descubrió que esto simplemente reflejaba una relación patrilineal entre la víctima y Aquino, quienes resultaron ser padre e hijo, un hecho desconocido hasta entonces.
Crítica hacia el juez
Los magistrados criticaron el juicio del juez de primera instancia por basarse en testimonios de familiares de la víctima que insinuaban sospechas hacia Aquino debido a cambios en su comportamiento después del delito. La decisión de la sala también cuestionó la interpretación del fiscal del caso, resaltando su falta de competencia técnica para evaluar adecuadamente los informes biológicos.
Como resultado de la revocación de la medida de prisión preventiva, se ordenó la liberación de Aquino, quien ahora deberá cumplir con ciertas reglas de conducta y pagar una caución de 1000 soles. Esta resolución destaca la importancia de una precisión técnica y una interpretación adecuada en el manejo de la evidencia biológica en el sistema judicial.
