Autoridades brasileñas lo buscaban por asociación ilícita, homicidio, robo y otros delitos

Buscando en Brasil

Jeferson Arcentales Ferreira, alias ‘Chala’, es un ciudadano brasileño de 25 años que se encuentra en el ojo de la tormenta legal con una alerta roja de la Interpol en su contra en Brasil por asociación ilícita, homicidio, robo y otros delitos.

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La primera vez que fue detenido en territorio peruano fue por posesión de armas de fuego y microcomercialización de drogas. A pesar de ser internado en la cárcel de Loreto con una orden de 18 meses de prisión preventiva, el fiscal Elix Vidal Sevillano no solicitó la ampliación de dicha medida, permitiendo que el individuo fuera liberado debido a un supuesto exceso de encarcelamiento, un hecho que sembró la primera semilla de controversia en torno al caso.

Falta de coordinación

Durante su encarcelamiento, la Oficina de Cooperación Judicial Internacional del Ministerio Público y la Corte Suprema no coordinaron eficazmente para asegurar el retorno de Arcentales a Brasil y garantizar su procesamiento por los delitos pendientes en su contra. La falta de acción y coordinación permitió que el individuo quedara en libertad, a pesar de la seriedad de las acusaciones en su contra.

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La segunda detención de Arcentales tuvo lugar en julio del presente año, nuevamente por posesión de drogas y un arma de fuego. Aunque el fiscal Adolfo Taminche Shupingahua intentó abordar el proceso de extradición, la jueza Karina Soto, a cargo del caso, ordenó 60 días de prisión preventiva. Sin embargo, una vez más, la coordinación entre la Oficina de Cooperación Judicial Internacional y el sistema judicial mostró fallas, y Arcentales fue liberado el 5 de septiembre, esta vez bajo el argumento de un exceso de carcelería.

Asesinato de mecánico

La tragedia alcanzó su punto culminante cuando, el 21 de septiembre, Jeferson Arcentales fue arrestado en Iquitos por el asesinato del mecánico Carlos Acevedo Agustín, de 40 años.

‘Chala’ iba a bordo de una motocicleta junto a su cómplice cuando dispararon dos veces en la cabeza del mecánico quien salía de su hogar con destino a su centro de trabajo. Según José Zapata Morante, jefe de la región policial de Loreto, hay una alta probabilidad de que el crimen haya sido cometido por encargo.

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Mejoramiento en el sistema judicial

La falta de coordinación y las omisiones en el sistema judicial se ven ahora reflejadas en las consecuencias mortales de dejar en libertad a un individuo con una trayectoria delictiva tan seria.  Este caso destaca la necesidad urgente de revisar los procedimientos y fortalecer la coordinación entre las agencias judiciales y de seguridad en Perú, subrayando la importancia de abordar las deficiencias sistémicas para evitar tragedias como la que ahora enluta a una familia y pone en entredicho la efectividad del sistema de justicia.

FUENTE VIDEO: 24 Horas