En medio de un brote alarmante de casos de Dengue, el gobernador Manuel Gambini Rupay puso en la Gerencia de Desarrollo Social a la obstetra Rocío Manuel Villavicencio Cuenta, duramente cuestionada cuando, hasta hace algunos días, ocupaba el cargo de directora regional de Salud de Ucayali y, en el colmo de los desaciertos, lo reemplazó con el médico Benjamín Paredes Ayala (quien ocupaba la subdirección), investigado por organización criminal cuando ocupó el cargo de director regional de Salud de Ancash.
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Cuando el pasado 6 de enero, Gambini presentó a Villavicencio como titular de la Diresa Ucayali, ella, en su discurso para asumir la dirección, señaló su compromiso para trabajar por el bienestar y la salud de la población ucayalina. Sin embargo, sin brindar alguna explicación a esta misma población a quién juró servir, y en plena alerta nacional por contagios de Dengue, el gobernador Gambini la cesó en el cargo de directora regional de Salud y la envió a dirigir la Gerencia de Desarrollo Social.
Pero ayer mismo, trabajadores del sector salud se movilizaron hacia el Gobierno Regional de Ucayali, para expresarle a Manuel Gambini, su malestar por este cambio pues consideran que si Villavicencio no pudo siquiera adoptar acciones para evitar el incremento del Dengue, peor podrá ocuparse de varios sectores, entre ellos Educación y Trabajo, que dependen de la Gerencia de Desarrollo Social.
EL NUEVO DIRECTOR
La decisión de designar al médico Benjamín Paredes Ayala, como nuevo director regional de Salud, para reemplazar a Rocío Villavicencio, de inmediato, también despertó cuestionamientos y rechazo de médicos y trabajadores que no lo consideran idóneo para el cargo.
De acuerdo con información que han conseguido los trabajadores de Salud, en el 2019, Paredes se desempeñó como director regional de Salud de la provincia constitucional del Callao (Lima), donde también habría tenido problemas por lo que en agosto de ese mismo año, renunció al cargo sin indicar los motivos, según el entonces gobernador del Callao, Dante Mandriotti.
En el 2021, Paredes se trasladó hacia la zona andina del país, para ser director del Hospital Regional Eleazar Guzmán Barrón del distrito de Nuevo Chimbote en el departamento de Ancash. El año pasado fue designado director regional de Salud y, en diciembre del año pasado, en medio de protestas y reclamos, ocupó nuevamente el cargo de director del Hospital Eleazar Gumán. Es decir, estaba dobleteando en cargos del Estado.
En Ancash, no solo recibió el rechazo de la población que pidió su destitución del cargo una semana después de su nombramiento, sino que se inició una investigación en su contra. El Frente Unificado de Defensa y Desarrollo del Hospital Regional Eleazar Guzmán Barrón -integrado por trabajadores administrativos, personal asistencial y cuerpo médico- expresó desacuerdo con su designación y exigió su cambio.
Leandro Pérez, presidente del Cuerpo Médico, indicó que se presentaron denuncias por malos manejos de los recursos del hospital.
«Hoy ha venido al hospital y está despachando. Como en Huaraz no lo quieren por las denuncias y cuestionamientos que tiene en este hospital por su pésima gestión, plagada de compras sobrevaloradas, no les ha quedado que traerlo nuevamente aquí. Nos solidarizamos con la lucha de nuestros compañeros de la Diresa y entendemos su preocupación por que ingrese una persona con tantas denuncias y que no ha hecho nada por la salud», expresó en ese entonces el dirigente.
Pero el rechazo no solo fue por parte del personal médico en Ancash, también se sumaron los trabajadores de la Diresa Ancash. Con la finalidad de hacer sentir su reclamo, una semana después que Paredes asumió la Diresa, el personal realizó una medida de lucha, instaló una olla común y colocó un ataúd frente al Gobierno Regional de Ancash como símbolo del riesgo que enfrentaba la población ancashina si el referido galeno asumía las riendas del sector Salud.
El enorme rechazo de los ancashinos por Paredes respondía en gran parte a la investigación que le iniciaron por organización criminal. Cuatro meses antes de su designación en la Diresa Ancash, según la carpeta fiscal 3106055600-2022-10-0, con fecha 11 de agosto del 2022 la Fiscalía Provincial Corporativa Especializada Contra la Criminalidad Organizada abrió investigación contra el gobernador de Ancash, Henry Borja, además contra Benjamin Ayala y otros.
LA INVESTIGACIÓN
La investigación de la Fiscalía nace de una denuncia formulada por el procurador anticorrupción del Santa, Richard Asmat Urcia, quien alertó que en el Gore Áncash se habría conformado una organización criminal “cuyo fin es apropiarse de los recursos económicos del gobierno regional, una vez asignados los presupuestos a las dependencias y direcciones regionales”.
A través de la disposición fiscal n.° 01-2021, de fecha 11 de agosto de 2021, el fiscal provincial Javier Gonzales Lázaro ordenó que se realicen las diligencias por el plazo de 36 meses en coordinación con el Departamento de Alta Complejidad de la Policía de Chimbote.
La investigación también incluía a las siguientes personas: Martín Sabino Alva Díaz, director adjunto del Hospital Regional; Juan Carlos Lachira Ríos, jefe de la Oficina de Planeamiento Estratégico; Luis Alberto Pajilla Evangelista, jefe de Administración, y Karen Johanna Vásquez Real, encargada de las contrataciones del personal.
La investigación a Paredes Ayala continúa y, si bien no hay sentencia, el hecho de haber asumido cargo público estaría transgrediendo el Código de Ética de la función pública (Ley N° 27815), cuyo artículo 6 establece que el servidor público debe observar, entre otros, los principios de Probidad (actuar con rectitud, honradez y honestidad… desechando todo provecho o ventaja personal…), y de Idoneidad (entendida como aptitud técnica, legal y moral…)
Según se conoce, los trabajadores del sector Salud en Ucayali, no aceptarían un funcionario que se estaría ocupando de responder a la justicia, antes que a sus obligaciones con el sector Salud.
TATIANA ZACARIAS