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El último martes 26 de marzo, Nazareno Jara, un joven de tan solo 19 años, fue encontrado sin vida dentro de su hogar, víctima de un acto atroz perpetrado por su propio padre en el barrio de Cumelén, provincia de Neuquén, Argentina.
Según las investigaciones realizadas por el Ministerio Público Fiscal, el padre de Nazareno, Federico David Alejandro Costich, de 39 años, se encontraba bajo los efectos de sustancias estupefacientes tras tres días de consumo junto a su hijo y otra mujer.
Padre incendia su propia casa tras discusión
Según investigaciones, todo se desencadenó tras una terrible discusión, Costich, presuntamente afectado por alucinaciones y un brote psicótico, creyó que su hijo representaba una amenaza mortal.
Este delirio lo llevó a cometer el espantoso crimen de prender fuego a su propia vivienda, con Nazareno adentro.
El relato de una testigo en el momento del incidente revela la escalofriante indiferencia de Costich mientras observaba impasible cómo la casa ardía.
Posteriormente, los bomberos encontraron los restos calcinados de Nazareno en el lavadero, confirmando la tragedia.
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Se entrega a las autoridades
Luego de tres días de estar prófugo, Federico Costich se entregó a las autoridades y confesó el horroroso crimen. Durante el juicio, tuvo una actitud desafiante hacia la madre de Nazareno, Ana, quien apenas mantiene contacto con él.
La jueza encargada del caso desestimó las hipótesis de la defensa, señalando la falta de fundamento y las contradicciones en la versión de Costich. Además, se revelaron detalles perturbadores sobre el maltrato sufrido por la hermana de Nazareno, Agustina, a manos de su propio padre.
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