El Salvador continúa imponiendo severas penas a los miembros de la Mara Salvatrucha (MS-13). Recientemente, José Joel Pineda Magaña fue condenado a 460 años de cárcel por extorsión agravada, marcando la sentencia más alta entre ocho pandilleros sentenciados por delitos similares.
La Fiscalía General de la República (FGR) anunció a través de su cuenta de Twitter que logró condenas de hasta 460 años para ocho pandilleros de la MS-13, acusados de extorsionar a 24 víctimas. Además de extorsión, varios de ellos fueron condenados por intento de asesinato contra siete personas y por pertenencia a organizaciones terroristas, delitos cometidos entre enero y julio de 2020 en Guatajiagüa, Morazán.
Las investigaciones revelaron que los pandilleros exigían pagos mensuales de entre 40 y 100 dólares a comerciantes, propietarios de autobuses y taxistas para permitirles operar.
En otra iniciativa, el presidente Nayib Bukele ordenó el traslado de 2.000 pandilleros adicionales a la cárcel de máxima seguridad conocida como Centro del Confinamiento del Terrorismo (Cecot). Esta instalación, la más grande de América con capacidad para 40.000 miembros de pandillas, fue inaugurada a finales de enero del año pasado, aunque el número exacto de internos actualmente alojados allí no fue especificado por el mandatario.