Pese a dos plantones y un intento de toma de la UNIA reclamando acciones de las autoridades, a la fecha, el estudiante investigado por presunta violación a otra joven estudiante de 17 años, continuaría asistiendo a clases, mientras la supuesta agredida aún no ha pasado por el examen de la Cámara Gesell. En tanto estudiantes que se reunieron con el Rector refirieron otros posibles casos de acoso sexual de docentes a estudiantes.
El fiscal José Antonio Samanez Niño De Guzmán, adjunto de la 1° Fiscalía Provincial Penal Corporativa de yarinacocha, aseguró que aun no se ha hecho el examen de la Cámara Gesell, pues se espera que la jueza Angela Maria Zamudio Navarro del juzgado de Investigación Preparatoria – Sede Central, acceda a este pedido. La jueza, sin embargo, basándose en el articulo 244 del Codigo Procesa Penal, corrió traslado por dos días para que los demás sujetos procesales presenten sus consideraciones respecto a la prueba solicitada”.
Tanto el portal web, Pasión por el Derecho, como el protocolo del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables precisan que el examen Gesell debe ser urgente.
HECHOS
Fue un familiar de la menor estudiante de 17 años, quien el 6 de junio denunció que un día antes, la menor habría sido violada por otro estudiante quien le hizo beber una gaseosa y perdió el conocimiento.
Según la teoría fiscal, el estudiante LMSY llamó por teléfono a la menor para pedirle que le entregue su camiseta. En el expediente de la fiscalía se lee: “Inicialmente la menor agraviada se negó a ir, pero ante la insistencia de su amigo, accedió a hacerlo. Al llegar al albergue “Angar”, se encontraron en una choza… en ese lugar, el denunciado intentó abrazar a la menor, a lo cual ella se resistió… el denunciado le ofreció una gaseosa. Luego de consumir la bebida, la agraviada indica que sintió mucho sueño, perdió la estabilidad y eventualmente el conocimiento”.
La menor despertó en un sector boscoso de la universidad y sentía dolores en su vejiga y bajo el vientre. Envió mensajes de WhatsApp a sus amigos para que la ayuden. Ellos llegaron y filmaron su testimonio.
VICERECTOR
Los estudiantes se comunicaron con el vicerrector académico, Hernán Ávila, quien, junto a Juan Ríos, trabajador administrativo, trasladaron a la menor hacia el tópico de la universidad. El secretario general de la UNIA, Alex Astohuaman, quién recogió la versión de testigos, dijo que el vicerrector y trabajador administrativo, tras dejar a la menor en el tópico, se retiraron. Según Astohuaman, Ávila y Ríos podrían perder su cargo por omisión de funciones, al no denunciar el hecho inmediatamente.
Personal del tópico informó que la menor decidió salir del lugar.
El asesor legal de la universidad, ex fiscal Wilber Huamanyauri, informó que, al enterarse del caso, fue al tópico.
“Concurrí a Bienestar Universitario donde encontré en el interior a la profesora Julia Yon Delgado, quien dijo ser la encargada de la residencia universitaria, a Fryda Erazo, asistenta social, y a Damaris Salazar, nutricionista y a un profesor… La asistente social me señaló que no es cierto lo que señalan los alumnos ya que ella es quien evaluó a la alumna y manifestó que se encuentra bien y se fue a sus clases… en ese acto le pregunté si puso de conocimiento al rector o Defensoría Universitaria y señaló que no era necesario”.
El secretario general de la UNIA, Astohuaman, afirmó que se ha iniciado un proceso disciplinario contra los trabajadores por no haber reportado el hecho. También ocurriría lo mismo con el vicerrector académico, Hernán Ávila, y el trabajador administrativo Juan Ríos. El vicerrector académico, Avila, dijo que se pronunciará después de declarar en la Fiscalía.
MEDIDAS DE PROTECCIÓN
Rony Reategui Pinedo, abogado del Centro de Emergencia Mujer, solicitó el mismo día de la denuncia, 6 de junio, medidas de protección a favor de la adolescente. El juez Carlos Ballardo Japan las habría dado una semana después, el 14 de junio.
Según estudiantes de la UNIA las medidas de protección no se están ejecutando, ya que el denunciado, sigue asistiendo a la misma universidad de su presunta víctima.
Un familiar de la adolescente, afirmó que el denunciado le dijo a su prima que no lo denunciara, ya que a ambos los botarían de la universidad.
El Centro de Emergencia Mujer solicitó la ampliación de medidas de protección para que, en tanto duren las investigaciones, se realice la suspensión o cambio de lugar de estudios del denunciado. Si el juzgado aprueba eso se va a notificar a la universidad para que adopte las medidas.
Sin embargo, la Secretaría General de la UNIA, ha precisado que no pueden separar al estudiante, pues estarían vulnerando su derecho a la educación. Lo curioso es que el denunciado y la adolescente supuestamente abusada, son albergados en la UNIA. Pero la menor de la etnia wampis se encuentra bajo el cuidado de una docente.
CRÍTICAS
Cuando, denunciado el hecho, la adolescente fue llevada a Medicina Legal, para que le practiquen un examen, ella se negó a que le hagan el examen porque el médico era varón. Días después, una médico, le practicó el examen y concluyó que: “presenta signos de himen dilatable, no presenta signos de coito anal, no presenta signos de lesiones traumáticas corporales recientes en áreas extragenital ni paragenital”.
Para el perito forense Pablo Llauca habría irregularidades en este proceso. Para Llauca la médico que realizó la prueba no es una especialista. La presunta víctima es una joven indígena, cuyo idioma natal no es el español. El perito indicó qué: “si ella no habla el castellano, es un error del sistema… a medicina legal no le importa, piensan que están en Lima y que todo el mundo habla español, son fallas que al final perjudican”.
Según Llauca desde el octubre del año pasado, en Medicina Legal, no toman fotografías a las pruebas que se realizan, pese a estar contemplado en la Guía Médico Legal denominada “Evaluación Física de la Integridad Sexual en Presuntas Víctimas de Delitos Contra La Libertad Sexual”. “Muchas veces la fotografía revela que es mentira lo que esta escrito en el papel”, comentó.
MÁS DENUNCIAS
En la UNIA no solo se ha expuesto el caso de la menor wampis, durante la mesa de dialogo que sostuvieron las autoridades estudiantiles con los universitarios, ellos expusieron más posibles víctimas. Entre estudiantes y docentes expusieron denuncias de acoso sexual, señalando directamente a docentes de la universidad.
El ministro de Educación, Morgan Quero, anunció que más de 119 profesores han sido separados de sus puestos en la provincia de Condorcanqui, departamento de Amazonas por denuncias de agresiones sexuales contra menores Awajún.
¿Investigarán y separarán a docentes de la UNIA en los casos de acoso que mencionaron los estudiantes?
Tatiana Zacarias
