Por Sebastian F. Pérez

SFP. – ¿Qué provoca la “lluvia negra?

JCM. – Es la coloración del agua de lluvia con partículas en suspensión producidas por una alta concentración de hollín y de ceniza, por los incendios forestales. Las “lluvias negras” alteran los ciclos bioquímicos del suelo, del agua, del aire, es decir, de los ecosistemas. Es peligrosa, según la evidencia científica, tanto para la salud como para el medioambiente. Sin embargo, ahora mismo lo peligroso es la presencia de monóxido y otros compuestos en el aire.

SFP. – ¿Es probable que veamos “lluvia negra” en Pucallpa?

JCM. – Si existiesen los factores que la propician podría suceder en un futuro, pero no en las condiciones actuales. En cambio, sí corremos el riesgo de tener lluvias ácidas en los próximos días, y estas lluvias son altamente perjudiciales para el suelo, la vegetación, el equilibrio de los ecosistemas y la salud del hombre.

SFP. – ¿De qué manera afectaría a la salud la presencia de monóxido en el aire?

JCM. – Los principales afectados serán las personas con obesidad mórbida, personas con problemas cardiacos u otras condiciones de salud previas, porque, sufrirían infartos al miocardio por inhalación de monóxido de carbono, cuando es de forma sostenida y en altas concentraciones. Asimismo, existen otros contaminantes (liberados por los incendios forestales, dado que la madera contiene resinas, estas en forma de microgotas, son arrastradas por el monóxido) como los aldehídos e hidrocarburos policíclicos que según la evidencia científica son cancerígenos. Algunas mujeres podrían experimentar hipersensibilidad química, es de riesgo para mujeres embarazadas y en general ocasiona síntomas como irritación en ojos y mucosas que a mediano plazo se podrían convertir en enfermedades.

SFP. – Las autoridades de salud deberían tomar medidas…

JCM. – Deberían de estar preparadas para las diversas dolencias y enfermedades que se gestan con estas condiciones ambientales en la población, empezar a elaborar protocolos de atención para enfermedades cardiorrespiratorias y más. El monóxido de carbono, en forma de aerosol, está en el aire, por lo cual, produciría asma en niños y ancianos. Además, el monóxido durante la caída de temperaturas se condensa en el aire haciéndolo mas peligroso

SFP. – ¿Cómo podríamos protegernos?

JCM. – Deberíamos permanecer en casa, buscar espacios en los interiores del hogar lo más limpio posible de monóxido. Evitar las actividades al aire libre durante las horas de alta concentración de monóxido; las personas que tienen, por ejemplo, la rutina de hacer ejercicios en los parques, o, actividades al aire libre, les recomiendo que no lo hagan por el momento. Las mascarillas comunes que usábamos en cuarentena no sirven para protegernos del monóxido

SFP. – ¿En Pucallpa la concentración de los contaminantes es alta?

JCM. – Existe una gradiente positiva en la concentración, es decir a medida que crecen la cantidad de incendio se concentra más monóxido, pero también es verdad que el viento y la lluvia podrían cambiar el panorama. En Bolivia, Brasil, donde también provienen los humos (por incendios forestales) la concentración es altísima, por eso, en ambos países hubo la “lluvia negra”. El humo concentrado en Pucallpa que proviene de Bolivia, Brasil, o de focos de incendios cercanos, es mortal para las personas, seres vivos, porque afecta principalmente el sistema respiratorio.

SFP. – ¿Qué deberían hacer las autoridades?

JCM. – Las autoridades locales, regionales, nacionales, deberían realizar una evaluación continua de la calidad el aire durante diferentes horas del día, a partir de un informe técnico. ¿Por qué no implementan los planes de trabajo multisectorial contra incendios forestales? ¿O acaso no lo tienen? ¿Si en Pucallpa sufrimos esta inclemencia, como estarán nuestros hermanos de los pueblos originarios?

SFP. – ¿Es posible revertir esta catástrofe medioambiental?

JCM. – Considero que deberían crearse, ahora mismo, comisiones especializadas para afrontar la catástrofe. Es importante recordar que estos incendios son, en su mayoría, provocados y aunque no se puede revertir los daños ocasionados por los incendios, sí podemos unir esfuerzos para minimizar las consecuencias. 

DATO ADICIONAL

Jorge Castillo Mendoza es especialista en Gestión Ambiental. La entrevista fue realizada, el pasado jueves 12 de septiembre, por la densidad de humo acumulada en Pucallpa–producidos por los incendios forestales– que provocaría enfermedades respiratorias en las personas. La entrevista fue publicada en la Edición Impresa N°21350, pero, tuvimos que corregir unos datos acerca del tema. Castillo Mendoza, por supuesto, tuvo la disposición de colaborar una vez más con nosotros, en la corrección. Las disculpas del caso a los lectores del Diario Impetu.

ATTE. Sebastian F. Pérez