La entidad impuso una multa adicional de 3 UIT por maltrato físico hacia el consumidor, ya que el personal de seguridad le propinó un golpe, ocasionando daños a su teléfono celular
Sanción de Indecopi
Indecopi impuso una multa de 13 UIT (S/ 64,350) a KFC por practicar la discriminación contra un cliente debido a su atuendo de albañil. El incidente tuvo lugar cuando el ciudadano visitó uno de los establecimientos de KFC y fue abordado por el personal de seguridad, quienes le preguntaron si tenía la intención de consumir o simplemente utilizar los servicios sanitarios. Esta pregunta no fue planteada a ningún otro cliente que ingresaba al lugar.
Esta acción contravino el artículo N° 38 del Código de Protección al Consumidor, que prohíbe la discriminación contra los consumidores. En consecuencia, Indecopi sancionó a la empresa con 10 UIT. Además, la entidad impuso una multa adicional de 3 UIT por maltrato físico hacia el consumidor, ya que el personal de seguridad le propinó un golpe, ocasionando daños a su teléfono celular.
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Discriminación y agresión física
Ambos incidentes, discriminación y agresión física, ocurrieron el mismo día en 2019. El ciudadano ingresó al local de KFC para utilizar los servicios sanitarios y se retiró. Horas después, intentó regresar, pero fue interceptado por el personal de seguridad.
La pregunta incómoda llevó al ciudadano a grabar el incidente con su celular. Posteriormente, los agentes golpearon el dispositivo, que, al caer al suelo, sufrió daños. Ante la discusión, el gerente de KFC se aproximó y admitió la pregunta realizada por el personal de seguridad al consumidor, aunque minimizó el hecho: «Solo fue una pregunta, nada más».
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Respuesta de KFC
KFC respondió señalando que las grabaciones de sus cámaras de seguridad mostraban que el consumidor y dos acompañantes ingresaron al local. Alegaron que el usuario utilizó los baños del primer piso del establecimiento con un acompañante, mientras que el otro acompañante usó los baños del segundo piso. Según KFC, no hubo discriminación, ya que los consumidores pudieron ingresar al local.
Además, KFC argumentó que «el consumidor adoptó una actitud desafiante y amenazadora, generando un escándalo que incomodó tanto a los clientes como al personal de trabajo». También cuestionaron que el denunciante grabara desde el interior del local sin autorización ni consentimiento.
En cuanto al daño del dispositivo móvil, KFC detalló que la empresa de seguridad, a la que tercerizaban el servicio, llegó a un acuerdo con el denunciante para reparar los daños de su celular, pero señalaron que esto no implicaba reconocer la culpa.
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Indecopi determina discriminación
Ante los argumentos presentados por KFC, Indecopi afirmó que, si bien no se pudo certificar que el personal de seguridad hizo comentarios negativos sobre el aspecto y vestimenta del consumidor, retenerlo para cuestionar su ingreso al local evidenció un trato diferenciado. El personal de seguridad no realizó preguntas similares a otros consumidores que ingresaban al establecimiento.
@depaul79