La reciente victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, que le asegura un segundo mandato entre 2025 y 2028, ha desatado un abanico de reacciones tanto dentro de su país como en América Latina. En Perú, donde las opiniones sobre el exmandatario se encuentran divididas, distintas figuras públicas y analistas han manifestado sus posturas a través de redes sociales, lo que ha generado un intenso debate sobre las implicancias de su regreso para la región.
El impacto de la victoria de Trump en América Latina
Trump, quien se impuso en los comicios de 2024 frente a la actual vicepresidenta Kamala Harris, alcanzó la victoria en varios estados clave, entre ellos Georgia, Carolina del Norte, Pensilvania, Michigan y Wisconsin. Este éxito consolidó su liderazgo en el Partido Republicano y reflejó, según algunos analistas, un claro rechazo a la gestión de la administración Biden.
En Perú, como en muchos otros países latinoamericanos, la noticia ha sido recibida con una mezcla de opiniones. Mientras algunos aplauden el regreso de un líder que consideran aliado de la derecha conservadora, otros critican su retórica divisiva y sus políticas de confrontación.
Reacciones de analistas y figuras públicas
Uno de los primeros en pronunciarse fue Christian Aranda, político y activista socialcristiano de Arequipa, quien celebró la victoria de Trump a través de su cuenta en X (antes Twitter), destacando que su triunfo representaba «la victoria de los valores conservadores, patriotas y soberanistas del hemisferio». Aranda considera que la derecha latinoamericana ha recuperado a su “mejor aliado” con este resultado. Esta visión fue compartida por un sector de la ciudadanía peruana que ve en Trump un modelo para enfrentar el progresismo y las políticas liberales que, según ellos, dominan la política de la región.
Por otro lado, Gonzalo Blanda, analista político, expresó su opinión en la misma red social al señalar que la victoria de Trump refleja el descontento generalizado de la clase trabajadora y la impopularidad de los actuales presidentes en el mundo occidental. Según Blanda, la capacidad de Trump para conectar con amplios sectores de la población estadounidense le ha permitido sobreponerse a una elección que muchos daban por perdida. «Es brutal la cantidad de votos que está recortando Trump en Pennsylvania con cada actualización. No está cerca de ser una elección reñida», aseguró.
El lado crítico: la voz de la oposición
Sin embargo, no todas las opiniones en Perú han sido positivas. El internacionalista Miguel Rodríguez Mackay, en una entrevista para Exitosa Noticias, recordó las tensas relaciones que Trump mantuvo con América Latina durante su primer mandato, especialmente con países como Perú, a quienes criticó abiertamente. En su análisis, destacó las políticas migratorias del expresidente, como la construcción del muro fronterizo, que perjudicaron las relaciones bilaterales, así como su actitud despectiva hacia la región.
Rodríguez Mackay advirtió que, con el retorno de Trump a la Casa Blanca, los países latinoamericanos, incluido Perú, podrían enfrentarse a nuevos desafíos, en particular en lo relacionado con la migración y las políticas comerciales. «Este resultado lo ha empoderado mucho», afirmó, refiriéndose a la renovada posición de poder que el expresidente ha alcanzado tras su victoria.
Por otro lado, Óscar Vidarte, internacionalista y doctor en Ciencias Políticas, no escatimó en críticas al considerar que la reelección de Trump es una señal preocupante para la democracia estadounidense y mundial. «Cuando una democracia vota por un delincuente, además de intolerante, xenófobo, racista y mentiroso, algo está funcionando mal», escribió Vidarte en sus redes sociales. El investigador no dejó de señalar que, si bien Kamala Harris no fue una vicepresidenta destacada, la derrota de los demócratas refleja, en su opinión, un «vacío de liderazgo» en el partido y un fracaso de la estrategia política a largo plazo.
Implicancias para Perú y América Latina
La segunda presidencia de Donald Trump promete marcar un nuevo capítulo en las relaciones diplomáticas de Estados Unidos con América Latina, y especialmente con Perú. Durante su primer mandato, las relaciones fueron tensas, especialmente en temas migratorios, comercio y política exterior. Trump, en su primer encuentro con el entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski, había expresado su preocupación por los peruanos en situación irregular en los Estados Unidos, aunque no hubo grandes cambios en las políticas bilaterales. En ese entonces, Kuczynski destacó que, de los 700,000 peruanos en situación irregular, solo una pequeña fracción estaba involucrada en actividades delictivas.
Además de la política migratoria, las relaciones comerciales entre Perú y Estados Unidos, basadas en el Tratado de Libre Comercio (TLC) firmado en 2009, han sido uno de los puntos más estables. Sin embargo, con Trump nuevamente en el poder, podrían surgir nuevas tensiones relacionadas con el comercio y la inversión, dado su enfoque proteccionista y su tendencia a promover políticas que favorecen el nacionalismo económico.
Conclusión: un retorno controversial
La elección de Donald Trump para un segundo mandato como presidente de los Estados Unidos es un evento que, sin duda, tendrá repercusiones en todo el continente americano, incluido Perú. Las reacciones en redes sociales y los comentarios de analistas muestran una polarización evidente: mientras que algunos celebran su victoria como una reafirmación de los valores conservadores, otros alertan sobre los riesgos que este regreso implica para las relaciones internacionales y la democracia en general.
A medida que Trump se prepara para asumir la presidencia nuevamente, será crucial observar cómo sus políticas afectan a la región y cómo los países latinoamericanos, como Perú, se adaptan a este nuevo contexto geopolítico, que promete seguir siendo tan incierto como desafiante.