La depresión puede afectar a personas de todas las edades, incluyendo niños y adolescentes. En el primer trimestre del año, el Ministerio de Salud (Minsa) atendió 9,065 casos de depresión en niños y adolescentes en todo el país, representando el 13% del total de casos tratados.
Margarita Pinao, psiquiatra del Minsa, señaló que la cifra ha aumentado desde la pandemia, aunque podría ser mayor debido al “infradiagnóstico”, ya que los padres no siempre reconocen los síntomas.
Síntomas
Los síntomas de la depresión en niños y adolescentes varían. En la primera infancia, la irritabilidad es un signo común, junto con dolores de cabeza, cansancio y desinterés por el juego. Entre los adolescentes, la depresión puede manifestarse como tristeza persistente, desánimo, alteraciones del sueño y situaciones de conflicto. “En esta etapa suelen ser afectadas más las mujeres”, agregó Pinao.
Las causas de la depresión en la infancia son diversas, incluyendo cambios neuroquímicos o hormonales, rasgos hereditarios, o eventos traumáticos. Pinao advirtió que la falta de tratamiento oportuno puede llevar a la necesidad de medicación. Para recibir orientación sobre la depresión, se puede llamar a la línea 113 opción 5, que ofrece apoyo durante toda la semana.
