La Sala Penal de Apelaciones de Huánuco ratificó la sentencia de Yuli Antonia Ponce Medrano, ex-cajera de la empresa comercial Camones, ordenando la devolución de 195,529 soles que presuntamente sustrajo. Además de esta restitución, la condena incluye cuatro años de pena privativa de libertad suspendida y el pago de 5,000 soles por reparación civil.
Según el Ministerio Público, Ponce Medrano se incorporó a Camones en diciembre de 2014, ubicada en Amarilis, Huánuco, como auxiliar de oficina. Para mayo de 2015 fue asignada al área de caja, donde su función era manejar los ingresos de ventas diarias de motos y trimóviles, gestionando luego los depósitos al Banco de Crédito para la sede en Tingo María.
Entre enero de 2017 y febrero de 2018, Ponce Medrano habría utilizado su acceso a la caja para apropiarse de fondos que recibió en cobranzas, evitando depositar la totalidad a la sede central. En febrero de 2018, Camones detectó irregularidades en los registros de pago de clientes, donde se notaron diferencias entre las fechas y montos registrados en las tarjetas de cobranza. Esta situación llevó al gerente administrativo, Eliseo Camones Lafosse, a realizar una auditoría interna, revelando un faltante de 195,529 soles.
Al descubrirse el desfalco, Ponce Medrano presentó su renuncia en marzo de 2018 y reconoció la apropiación de fondos, presuntamente con ayuda de familiares. Tras múltiples intentos de recuperar el monto mediante cartas notariales, Camones procedió con la denuncia formal que resultó en la condena ratificada.
Esta sentencia destaca la importancia de la transparencia y el control interno en las empresas para evitar y detectar irregularidades en la gestión de fondos.