¿Quién dijo que las tortugas son lentas? Una tortuga llamada Terry sorprendió a todos al descubrir una solución inusual pero efectiva: el uso de un patinete eléctrico, conocido como skey, para desplazarse con mayor rapidez.
Esta historia única comienza en el hogar de una familia que incluye a una tortuga llamada Terry, como muchas tortugas, siempre se movía a un ritmo tranquilo y constante. Sin embargo, mediante un inusual regalo, descubrió la manera de movilizarse rápidamente por toda la casa.
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Terry se topó con un patinete eléctrico, que había sido adquirido por uno de los miembros de la familia. Con curiosidad, decidió subirse al patinete y darle una oportunidad. Para su sorpresa, descubrió que podía desplazarse por la casa con mucha más rapidez de lo que había imaginado.
A bordo de su vehículo la tortuga comenzó a explorar cada rincón de la casa de una manera que nunca había sido capaz de hacer antes. Ya no se limitaba a moverse lentamente por el suelo, sino que podía deslizarse con agilidad y velocidad, alcanzando lugares antes inaccesibles.
Lo que más asombró a todos fue la capacidad de Terry para perseguir al gato de la casa con su patinete eléctrico. El gato, acostumbrado a ser el rey de la velocidad en la casa, se encontró repentinamente superado por la tortuga.