En los últimos días viene circulando la información que se incrementaría el precio de los combustibles en los grifos de la localidad, mientras algunos distribuidores minoristas de gas doméstico ya incrementaron sus precios, entre uno y dos soles más.
Según la información de fuentes vinculadas a los vendedores de combustibles, PetroPerú, el único proveedor en la selva amazónica, habría comenzado a racionar sus ventas, mientras que, todos los años, entre junio y julio se incrementa la demanda por que se produce mayor actividad de extracción forestal, por lo que, si hay poco combustible, los grifos, ante la gran demanda y poca oferta se verán obligados a subir los precios, aplicando la ley de la oferta y demanda del mercado.
Si se eleva el precio de los combustibles, también se elevarán las tarifas de transporte y otros productos que demandan combustible para el transporte.
También esta situación va a propiciar la especulación, contrabando y toda actividad ilegal.
Es más se comenta que en la costa hay barcos que no pueden descargar crudo para las refinerías y combustibles porque no tienen dinero para pagar el desaduanaje. Una situación similar a lo que ocurrió en el 2022.
De ese modo, la población, sobre todo los transportistas, deben estar organizándose para plantear soluciones a este problema.
